Los calentadores solares se usan comúnmente en el calentamiento de agua para albercas, servicios domésticos como el lavado de trastes y ropa y en establecimientos públicos como los hoteles. Son sencillos, fáciles de instalar y tienen una larga duración (hasta de 20 años) si se les da un trato correcto. La ventaja más grande que se le ha encontrado a estos calentadores es que son capaces de reducir desde el 50 hasta el 100%, en el mejor de los casos, el consumo de la energía eléctrica o de gas que normalmente se utiliza para este fin. Todo esto, dependiendo del clima del lugar (no será igual la energía captada en un clima frío que en uno soleado) y la estación del año, volviéndolos una opción para economizar. Sus componentes básicos son el colector de energía o panel termosolar, que se encarga de transferir la energía al agua (pueden ser tubos, serpentines, tubos de vacío, cilindros parabólicos). El segundo es el contenedor, donde se almacena el fluido y se conecta directamente al colector, que es el sistema que incluye las tuberías, llaves, controles y accesorios. Y por último, la sustancia de trabajo que generalmente es el agua potable que vamos a usar.
Los calentadores solares se pueden clasificar en: los activos, que usan bomba o alguna energía para mover el agua en su ciclo. Y los pasivos, que no requieren energía para funcionar, lo logran sólo con la convección.
Según su capacidad de calentar también se pueden dividir en: lo de baja temperatura, que sólo generan temperaturas de 65 ºC, perfectos para el uso en casa, albercas y actividades de la industria donde el calor necesario no sea muy alto. Los de temperatura media, que pueden llegar a temperaturas de entre 100 y 300°C. Y los de alta temperatura, que alcanzan los 500°C y que muchas veces son generadores de energía eléctrica.
Gracias a que nuestro país está situado geográficamente en un punto donde el sol puede ser utilizado para generar energía fácilmente, la venta de calentadores solares es un excelente negocio, y para el comprador siempre será una excelente inversión a largo plazo.